López Marín, Beatriz EstellaCardona Arengas, Marbe Alexandra2020-02-062020-02-062019http://hdl.handle.net/10567/2683La cifra mundial de muertes neonatales se ha reducido de 5,1 millones en 1990 a 2,6 millones en 2017. Sin embargo, la reducción de la mortalidad neonatal entre 1990 y 2016 ha sido más lenta que la de la mortalidad posneonatal en menores de cinco años: 49% y 62%, respectivamente ((OMS, 2015) y (OMS, 2017)). Esto se relaciona con la mayoría de los países de ingresos bajos y medios. Si se mantienen las tendencias actuales, aproximadamente la mitad de los 69 millones de muertes en la niñez que se producirán entre 2017 y 2030 tendrán lugar en el periodo neonatal. Se prevé que la proporción de muertes neonatales entre las muertes de menores de cinco años aumente al 52% en 2030 ((OMS, 2015) y (OMS, 2017)). Los niños malnutridos, especialmente aquellos con una malnutrición aguda grave, poseen más probabilidades de morir por enfermedades comunes en la infancia como la diarrea, la neumonía y el paludismo. Diversos factores relacionados con la nutrición contribuyen a aproximadamente el 45% de las muertes de niños menores de cinco años (M. J. Fox, Ahuja, & Eri, 2013). Según las estadísticas e informes de la Organización mundial de la Salud (OMS), las enfermedades gastrointestinales más comunes en población infantil son las relacionadas con la diarrea (Guzganu, 2012). En las enfermedades de transmisión alimentaria, las diarreicas causan más de la mitad de la carga mundial, con 550 millones de personas que enferman y 230.000 que mueren cada año. Los niños corren un riesgo especial de padecer enfermedades diarreicas transmitidas por los alimentos: 220 millones enferman y 96.000 mueren cada año. La diarrea suele deberse a la ingestión de carne y huevos 2 crudos o mal cocidos, verduras y frutas mal lavadas, y productos lácteos, contaminados por norovirus, Campylobacter, Salmonella no tifoídica y Escherichia coli patógena (OMS, 2015). Otros factores importantes que contribuyen a la carga mundial de las enfermedades de transmisión alimentaria son la fiebre tifoidea, la hepatitis A, Taenia solium (tenia) y las aflatoxinas (producidas por el moho en granos almacenados de forma inapropiada) (OMS, 2015) La mortalidad debida a las enfermedades diarreicas, la neumonía, la desnutrición y las enfermedades que pueden ser prevenidas mediante la vacunación ha disminuido significativamente en el continente americano. Aun así, como se muestra en la figura 2, las enfermedades diarreicas y la neumonía siguen siendo causas destacadas de muerte; en el 2015, causaron 14% de las defunciones totales en los niños de 1 a 59 meses de edad (OMS, 2015).esAcceso abiertoCorporación Universitaria LasallistaComunicación y PeriodismoAlimentos saludablesAlimentos valor nutricionalNutrición infantilT-CD-ROM 641.1 C268Desarrollo de una compota funcional a partir de una cepa probiótica, para lactante de 6 a 12 meses.Thesisinfo:eu-repo/semantics/openAcces